En la zona de las Rías Baixas hay unos cuantos restaurantes de referencia para disfrutar de un buen marisco gallego. En todos los restaurantes el viajero puede encontrar pescados deliciosos y buenos vinos de alguna de las 5 Denominaciones de Origen de Galicia; aunque si estamos en las Rías Baixas lo ideal será tomar un albariño.
Preparamos una selección de restaurantes que merece la pena conocer:
- Restaurante Bitadorna (A Guarda, Pontevedra). Apuesta por el producto de primera y la elaboración justa según el tipo de marisco. La reina de la casa es la langosta, muy típica en A Guarda, donde tiene su propia Fiesta Gastronómica (el primer fin de semana de julio). Otros mariscos recomendables en el Bitadorna son los percebes cocidos, las ostras al albariño, camarones, bogavante, y todo tipo de marisco de concha.
- Restaurante El Pescador (Bueu, Pontevedra). El pescado fresco y el marisco de la Ría son los referentes de la casa, junto al pulpo de Bueu, uno de los mejores de Galicia. Algunos de los platos que nos ofrecen son las nécoras y la centolla cocidas, bogavante o zamburiñas a la plancha, mejillones al vapor, y pulpo al ajillo con langostinos.
- Restaurante Corinto (Alba, Pontevedra). Un restaurante con aspecto humilde exteriormente, al pie de una carretera nacional, pero que esconde el mejor salpicón de marisco. Ambiente familiar y cocina tradicional, donde el buen producto del mar es la base de la carta. Podemos pedirnos una centolla de la Ría, unas almejas a la marinera, la exquisita empanada de zamburiñas y el salpicón de marisco.
- Restaurante D’Berto (O Grove, Pontevedra). Posiblemente el más conocido en todas las Rías Baixas. Su fama viene justificada por el extraordinario marisco que ofrecen, tanto en calidad como en cantidad. Es el lugar idóneo para toparse con una centolla o un bogavante de 3-4 kilos.
- Restaurante Loliña (Carril, Pontevedra): Un restaurante de cocina tradicional, con los sabores de toda la vida. El Loliña se sitúa en la pequeña localidad de Carril, pegada a Vilagarcía de Arousa, y conocida por las famosas almejas de Carril. Un restaurante familiar, con más de 60 años de historia, que ocupa una centenaria casa de piedra, en una zona donde antiguamente se encontraba la Aduana del puerto. Algunas de las especialidades de la casa son las vieiras gratinadas, la centolla de la Ría, los camarones cocidos, y, cómo no, las almejas de Carril en diversas preparaciones.